22 Ago ¿Celoso o envidioso, es lo mismo?
Se tiene la creencia cuando se pone sobre el tapete el tema de los celos y la envidia de que se trata del mismo fenómeno emocional, pero son distintos.
Los celos tienen un contexto amoroso mientras que la envidia tiene un componente destructivo.
El envidioso no quiere que la otra persona disfrute de algo, un coche, una persona, una carrera, una habilidad, no importa lo que sea, quiere que el otro sufra. Se compara y en esa comparación quien se compara sale perdiendo.
Mientras que en lo celos por el contrario alguien no quiere que la persona que ama le dé a otro lo que ella quiere sólo para sí misma, el amor, la ternura, las caricias.
¿Has visto a dos niños peleándose por el carrito exactamente igual de su amiguito? Le explicas al niño que reclama el carrito del otro que son exactamente iguales, el niño que siente envidia dice “no me importa, yo quiero ese”. Esta imagen refleja fielmente el fenómeno de la envidia.
La envidia es mucho más malsana y enferma que los celos. El celoso deposita tanto amor sobre su pareja que queda vacío de amor propio. Teme que su pareja encuentre a alguien más guapo, más inteligente, alguien que le puede ofrecer cosas mejores, viajes increíbles, una sexualidad alucinante, etc….
Tanto quien sufre de celos como de envidia transita por un camino angustioso, la buena noticia es que es posible identificar en qué momento de la infancia aprendiste este esquema emocional para sanarlo.
¿Sientes angustia por alguno de estos fenómenos? Cuéntame tu experiencia: [email protected]. +57 300 780 72 69
Lo sentimos, el formulario de comentarios está cerrado en este momento.