A la angustia ponle palabras – (abuso infantil)

A la angustia ponle palabras – (abuso infantil)

Eso lo sabemos los psicólogos y por supuesto los analistas que la angustia no permiten el espacio para las palabras, tampoco para los proyectos y los deseos. Y de ello dieron cuenta Julián y Mateo,  de 7 y 8 años respectivamente.

Estaban jugando en el parque, de pronto Mateo le dijo a Julián: escribamos todos nuestros secretos en un papel, lo firmamos y es nuestro pacto y luego lo escondemos en un lugar donde nadie lo vea. Así lo hicieron. Cobijados por la inocencia,  apenas terminaron de vaciar en el papel todas sus agonías,  Mateo le pidió a su mamá que cociera las hojas. “Qué es eso hijo”. Nada mamá, es algo entre Julián y yo.

Cuando Mateo y Julián salieron de la casa,  Valeria, la madre de Mateo fue en busca del papel que había grapado, y allí se enteró de la verdad: Danilo el amigo común de los dos niños, de  12 años les pide a los chicos sexo oral, prometiendo un privilegio: “para subirte de nivel”.

Los padres de los niños vinieron a mí  aterrorizados, “se volverá gay nuestro hijo”, “se convertirá en un pervertido a futuro” “se ha dañado su sexualidad” “esto marcará su vida sexual por siempre”…

Algunas de las recomendaciones que le indiqué a Valeria:

Es importante crear un espacio para hablar con tu hijo, mantener la calma, no te molestes, no te enojes, no llores,  ni dramatices la situación.

Los juegos sexuales entre pares de edades similares son normales y necesarios, pero el caso que se configura aquí es el de un abuso, es la intrusión traumática de la sexualidad adulta, pues en esta etapa cronológica la diferencia de  5 años significa mucho.

Decimos que son juegos sexuales, como parte de la sexualidad infantil cuando hay un acuerdo entre los niños de jugar este juego: se realiza mediante juego de roles jugando al doctor, a la mamacita. No lo comparten con los adultos, ni les angustia.

Este comportamiento se aleja del juego cuando un niño es obligado, Danilo adopta el poder y un rol de sometedor, Julián y Mateo son sometidos. Esta situación generó angustia en los niños y por ello buscaron una forma de sacarlo afuera, de alguna manera el hecho de pedir a la madre que grape las hojas es la manera inconsciente de revelar al adulto la angustia que los habita.

Aquí estamos hablando de abuso, de un aprendizaje previo  y la pregunta que surge es: ¿dónde aprendió Danilo ese comportamiento?, ¿de quién lo aprendió, quién lo sometió?

La intromisión de la sexualidad adulta en el niño es traumática, su cerebro no está aún preparado para ello, tampoco tiene capacidad para comprender lo que está ocurriendo, independientemente que haya experimentado placer. Y si no se produce un estallido (la carta del secreto entre Julián y Mateo) más tarde en la adolescencia se entenderá como un acto genital y puede dar lugar a la compulsión ligado al hecho traumático.

Los niños al ser sometidos a esta experiencia pueden mostrar cambios en su estado emocional, puedes verlos enojados, tristes, tener cambios de comportamiento en la alimentación o en su dormir.

Es importante crear un espacio para hablar con el niño como dije antes,  sin dramatizar indicando que  hay un momento para cada cosa y cada momento tiene su lugar. Hablarle sobre el respeto y la manipulación: no hagas a nadie lo que no quieres que te hagan a ti. La importancia de preservar sus valores: no se vale todo para ser aceptado por los demás, lo primero es tu auto respeto, ser tú mismo.  No permitas a  nadie decirte lo que puedes o no puedes, lo que debes o no debes hacer. Nunca te aproveches de nadie a cambio de tu amistad y no, nunca dejes que nadie te dé su amistad a cambio de algo.

Es importante que en el  diálogo esté la  compañía del otro padre, en la medida de lo posible y ratificar: nosotros te amamos y siempre lo vamos a hacer.

El cuidado en el manejo de esta información es importante para su sexualidad futura: explícale la realidad: tu cerebro no está listo para recibir este tipo de experiencias aún, así como no estás listo para manejar un auto, de igual manera este tipo de experiencias aún no son para ti.

Busca el  espacio para hablar de la sexualidad, por ejemplo en el momento del baño, cuando llega un nacimiento a la familia, cuando observes una mujer embarazada. Mientras ven una película. Al responder sus preguntas,  sé claro y natural, si el niño se ríe maliciosamente, simplemente le explicas con naturalidad. No andes con subterfugios, utiliza metáforas de la  naturaleza y si no sabes la respuesta apóyate en los videos sobre sexualidad infantil que encuentras en la red.

Además de este encuadre recomendé a Valeria que debía prohibir a su hijo la compañía con Danilo, indicando que lo hace porque necesita protegerlo de su círculo de amistades, las que no son adecuadas para el chico.

 

 

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